
Tengo sed de VENGANZA
La ira puede enturbiar tu cerebro, incluso puede cambiarte, transformarte, moldearte y darte la forma de algo que no eres. Por eso el único lado positivo de la ira, es la persona en la que te conviertes. Con suerte, puedes despertar un día y darte cuenta de que no tienes miedo y que sabes que la verdad es como mucho, una historia parcialmente relatada. Porque la ira, como todo en la vida, viene a rachas.